Este fin de semana leyendo varios artículos, me encontré con un articulo publicado por Gallup en 2011 , en el cual mencionaba el concepto de “empleados activamente no comprometidos”.
Los empleados que están “activamente no comprometidos” no están emocionalmente comprometidos con su trabajo y su organización. Esto no significa que estos empleados son necesariamente malos en su trabajo asignado. Lo que si es que ellos van a trabajar y hacen lo que se les pide hacer, sin un esfuerzo adicional, solo lo necesario. No van a hacer sugerencias para mejorar los procesos o métodos de trabajo en sus departamentos. No van a ofrecer nuevas ideas. Ellos no están involucrados emocionalmente, hacen su trabajo y cuando termina el día, son los primeros en salir, (si no están haciendo fila 1 min. antes de la hora de salida) y una vez fuera de su empresa no piensan en su trabajo o sus organizaciones.
Estos empleados pueden hundir la moral y el rendimiento de las empresas. En tales casos, las empresas deben tratar de determinar lo que hay detrás de esa falta de vínculo para evitar que se salgan de control y terminen afectando la productividad.
La organización tiene que entender cuáles son las causas de la desconexión activa…. Es el perfil de la persona contratada, son las condiciones de trabajo, es la estructuración de las tareas, el diseño organizacional, o es el comportamiento de liderazgo inadecuado de los supervisores de primera línea ¿??
Asi como se ha dicho que las guerras del futuro entre países serán por el agua, en el campo empresarial ya se empieza a decir que las guerras serán por la creación del mejor trabajo, y para muestra el libro “The Coming Jobs War”, escrito por el presidente y director de Gallup, Jim Clifton.
“Los líderes… deben enfocarse en la creación de buenos empleos, porque si el trabajo mejora, también lo hace el destino de una nación. El trabajo trae prosperidad, paz y desarrollo humano, el desempleo… arruina vidas, ciudades y hasta países”.
Departamento de Ventas | Alejandro Rodriguez